Quiénes Somos

Mons. Arturo Pablo Ros Murgadas, Obispo de Santander

Mons. Arturo Ros Murgadas

Ilmo. Sr. D. Álvaro Asensio Sagastizabal

Vicaría General

Ilmo. Sr. D. Álvaro Asensio Sagastizábal

Delegación de medios de comunicación social

Delegado: Rvdo. Sr. D. Antonio Arribas Lastra
prensa@diocesisdesantander.com
Nació en Ramales de la Victoria, el 21 de junio de 1989
Párroco in solidum de Castro Urdiales.
Ordenado el 22 de junio de 2014.
Estudios: Bachiller en Teología en Seminario Monte Corbán (afiliado a UPSA). Máster en Comunicación Social UPSA.

Delegación de medios de comunicación social

Rvdo. Sr. D. Antonio Arribas Lastra

Delegación para la causa de los santos

Delegado: M. I. Sr. D. Alejandro Benavente Talaverón
causadelossantos@diocesisdesantander.com
Arcipreste de la S.I.B. Catedral, Capellán del Hospital Valdecilla
Nació en Santander, el 1 de julio de 1972
Ordenado el 6 de octubre de 2013
Estudios: Bachiller en Teología en Seminario Monte Corbán (afiliado a UPSA). Licenciatura en Derecho Canónico (UPSA).

Delegación para la causa de los Santos

M. I. Sr. D. Alejandro Benavente Talaverón

Delegación de patrimonio

Delegado: Rvdo. Sr. D. José Manuel Ortiz Del Solar
patrimonio@diocesisdesantander.com
Párroco de Nuestra Señora de La Visitación, en Santander y Director de la Residencia Sacerdotal Bien Aparecida.
Nació en Herada de Soba, el 26 de agosto de 1942
Ordenado el 22 de junio de 1969
Estudios: Estudios eclesiásticos en Seminario Monte Corbán.

Delegación de patrimonio

Rvdo. Sr. D. José Manuel Ortiz Del Solar

Delegación para la protección de menores y acompañamiento de víctimas

Delegada: Dª María Esperanza González Domínguez
menores@diocesisdesantander.com
Nació en Mieres (Asturias), el 28 de mayo de 1969
Miembro Red de Escucha - Diócesis Santander
Estudios: Licenciatura en Filología Hispánica

Delegación para la protección de menores y acompañamiento de víctimas

Dª María Esperanza González Domínguez

Delegación para el cumplimiento normativo

Delegada: Dª Patricia Barcena Calante
cumplimientonormativo@diocesisdesantander.com
Nació en Santander, el 26 de marzo de 1969
Estudios: Licenciatura en Derecho por la Universidad de Cantabria.

Delegación para el cumplimiento normativo

Dª Patricia Barcena Calante

Vicario Episcopal: Ilmo. Sr. D. Jesús Casanueva Vázquez

Vicaría Episcopal para el clero

Ilmo. Sr. D. Jesús Casanueva Vázquez

Ilmo. Sr. D. Oscar Lavín Aja

Vicaría Episcopal para la evangelización

Ilmo. Sr. D. Oscar Lavín Aja

Delegación de catequesis y catecumenado

Delegada: Dª Raquel García Crespo
catequesis@diocesisdesantander.com
Nació en Santander el 4 de noviembre de 1987
Estudios: Magisterio de Educación Infantil y Magisterio de Educación Primaria.

Delegación de catequesis y catecumenado

Dª Raquel García Crespo

Secretariado Bíblico

Director: M.I. Sr. D. Juan Abad Zubelzu
serviciobiblico@diocesisdesantander.com
Párroco de Santillana del Mar. Ecónomo del Cabildo Catedral.
Nació en Santander, el 5 de mayo de 1972
Ordenado el 27 de junio de 2004
Estudios: Bachiller en Teología en Seminario Monte Corbán (afiliado a UPSA). Licenciatura en Teología Fundamental en la Universidad de Deusto.

Secretariado Bíblico

Rvdo. Sr. D. Juan Abad Zubelzu

Delegación de enseñanza

Delegado: D. José Iván Rodríguez Pérez
delegacionensenanza@diocesisdesantander.com
Nació en Santander, el 11 de abril de 1973
Estudios: Grado en Eduación Primaria por la UNIR. Programa de Dirección de Centros Educativos en Villanueva. Coordinador: D. HÉCTOR LAVÍN GONZÁLEZ Nació en Torrelavega, el 6 de noviembre de 1973 Estudios: Bachiller en Teología. Profesor de Religión en Secundaria y Bachillerato en Inst. Teología de Santander.

Delegación de enseñanza

D. José Iván Rodríguez Pérez

Delegación de pastoral con jóvenes

Delegada: Dª. Gloria Martín Díaz
delegacionjuventud@diocesisdesantander.com
Nació en Torrelavega, el 31 de octubre de 1970
Estudios: Diplomada en Profesorado de Educación General Básica

Delegación de pastoral con jóvenes

Dª. Gloria Martín Díaz

Secretariado de pastoral vocacional

Director: Rvdo. Sr. D. Juan De Cáceres Cabrero
vocacional@diocesisdesantander.com
Párroco de Puente Viesgo..., Director de la Casa de Espiritualidad Nuestra Señora del Soto y Capellán de Hakuna en Santander.
Nació en Santander el 12 de mayo de 1978
Ordenado el 21 de enero de 2018
Estudios: Bachiller de Filosofía por la Universidad de Navarra Bachiller en Teología por la UPSA.

Secretariado de pastoral vocacional

Rvdo. Sr. D. Juan De Cáceres Cabrero

Secretariado de pastoral universitaria

Director: Rvdo. Sr. D. Jesús Jimeno González
universitaria@diocesisdesantander.com
Párroco de Villaverde de Pontones.
Arcipreste de Santa María y Miera
Bibliotecario del Seminario de Corbán
Nació en Santander, el 5 de octubre de 1972
Ordenado el 2 de julio de 2000.
Estudios: Bachiller en Teología en Seminario Monte Corbán (afiliado a UPSA). Licenciatura en Teología Pastoral en el Instituto Catequético Salesianum (Roma).

Secretariado de pastoral universitaria

Rvdo. Sr. D. Jesús Jimeno González

Delegación de liturgia y espiritualidad

Delegado: Ilmo. Sr. D. Álvaro Asensio Sagastizábal
liturgia@diocesisdesantander.com
Delegado de liturgia y espiritualidad
Deán-Presidente del Cabildo Catedral
Nació en Burgos, el 7 de noviembre de 1973.
Ordenado el 27 de junio de 1999.
Estudios: Bachiller en Teología en Seminario Monte Corbán (afiliado a UPSA). Licenciatura en Teología Dogmática en la Pontificia Universidad Gregoriana (Roma).

Delegación de liturgia y espiritualidad

Ilmo. Sr. D. Álvaro Asensio Sagastizábal

Delegación de familia y vida

familiayvida@diocesisdesantander.com
Delegado: D. Justo Iguanzo Cano
Nació en Helguera de Reocín, el 17 de diciembre de 1961
Estudios: BUP
Delegada: Dª María Cruz Lorenzo Ortega
Nació en Suances, el 20 de agosto de 1965
Estudios: Graduado Escolar

Delegación de familia y vida

D. Justo Iguanzo Cano
Dª María Cruz Lorenzo Ortega

Delegación de apostolado seglar

Delegada: Dª Carmen González Fernández
apostoladoseglar@diocesisdesantander.com
Nació en La Vecilla (León), el 15 de abril de 1965
Estudios: Magisterio

Delegación de apostolado seglar

Dª Carmen González Fernández

Delegación de misiones y director diocesano de obras misionales pontificias

Delegado: Rvdo. Sr. D. Pedro Miguel Rodríguez Ricondo
misiones@diocesisdesantander.com
Párroco in solidum y Moderador de las parroquias de La Anunciación y de San Francisco de Asís de Santander.
Director del Colegio La Anunciación de Santander.
Nació en Santander, el 29 de julio de 1968
Ordenado el 22 de mayo de 1994
Estudios: Bachiller en Teología.

Delegación de misiones y director diocesano de obras misionales pontificias

Rvdo. Sr. D. Pedro Miguel Rodríguez Ricondo

Delegación de relaciones

Interconfesionales y diálogo interreligioso
Delegado: Rvdo. Sr. D. Daniel Gutiérrez Jordán
ecumenismo@diocesisdesantander.com
Párroco de Helguera y Valles, Quijas y Caranceja, Puente San Miguel y La Veguilla, Mijares.
Nació en Torrelavega, el 24 de marzo de 1974
Ordenado el 26 de junio de 2005
Estudios: Bachiller en Teología en Seminario Monte Corbán (afiliado a UPSA). Licenciado en Psicología.

Delegación de relaciones interconfesionales y diálogo interreligioso

Rvdo. Sr. D. Daniel Gutiérrez Jordán

Ilmo. Sr. D. Ricardo Alvarado Del Río

Vicaría episcopal para la acción caritativa y social

Ilmo. Sr. D. Ricardo Alvarado Del Río

Delegación de migraciones y movilidad humana

Delegación de migraciones y movilidad humana

Delegado: D. Jacobo Jofre Ocampo
migraciones@diocesisdesantander.com Nació en Madrid, el 13 de enero de 1973
Estudios: Diploma en Turismo. Discernimiento en común, Acompañamiento

Delegación de migraciones y movilidad humana

D. Jacobo Jofre Ocampo

Secretariado de turismo, santuarios y peregrinaciones

Director: Rvdo. Sr. D. Fernando Tabernilla Alonso
santuariosyperegrinaciones@diocesisdesantander.com
Párroco de Muriedas y Maliaño
Nació en Santander, el 7 de julio de 1971
Ordenado el 30 de junio de 1996
Estudios: Estudios eclesiásticos Seminario Monte Corbán.

Secretariado de turismo, santuarios y peregrinaciones

Rvdo. Sr. D. Fernando Tabernilla Alonso

Secretariado de la pastoral del mar

Director: Rvdo. Sr. D. Juan Luis Cerro Aja
apostoladodelmar@diocesisdesantander.com
Arcipreste de La Asunción y Párroco in solidum y Moderador de Nuestra Señora de la Asunción y Nuestra Señora de Loreto, en Laredo y de Liendo, Seña y Tarrueza
Nació en La Cavada, el 5 de octubre de 1959.
Ordenado el 11 de octubre de 1987.
Estudios: Estudios eclesiásticos.

Secretariado de la pastoral del mar

Rvdo. Sr. D. Juan Luis Cerro Aja

Secretariado de la pastoral de la carretera

Director: Rvdo. Sr. D. Antolín García Rozas
pastoralcarretera@diocesisdesantander.com
Párroco de Guarnizo y Astillero
Nacido en Santander el 6 de enero de 1974.
Ordenado el 30 de junio de 2002.
Estudios: Bachiller en Teología en Universidad de Comillas.

Secretariado de la pastoral de la carretera

Rvdo. Sr. D. Antolín García Rozas

Secretariado de la pastoral con gitanos

Director: Rvdo. Sr. D. Domingo Landeras Landeras
pastoralgitana@diocesisdesantander.com
Párroco in solidum y Moderador de Cueto, Peñacastillo-Campogiro y Monte.
Nació en Sama de Langreo (Asturias), el día 29 de noviembre de 1959
Ordenado el 12 de octubre de 1985.
Estudios: Estudios eclesiásticos en el Seminario de Corbán.

Secretariado de la pastoral con gitanos

Rvdo. Sr. D. Domingo Landeras Landeras

Delegación de pastoral social

Vicaría episcopal para la acción caritativa y social

Vicario Episcopal: Ilmo. Sr. D. Ricardo Alvarado Del Río
vicariacaritativa-social@diocesisdesantander.com
Nació en Cartagena, el 23 de octubre de 1972
Ordenado el 24 de junio de 2001
Estudios: Técnico Superior en Anatomía Patológica y Citodiagnóstico. Estudios eclesiásticos en Seminario Monte Corbán. Diversos seminarios y cursos en el ámbito de la evangelización y D.S.I.

Delegación de pastoral social

Ilmo. Sr. D. Ricardo Alvarado Del Río

Secretariado de pastoral de la salud

Director: Rvdo. Sr. D. José María Salazar Corino.
pastoraldelasalud@diocesisdesantander.com
Párroco de Polanco y Barreda
Nacido en Santander, el 24 de junio de 1973.
Ordenado el 26 de junio de 2005.
Estudios: Bachiller en Teología en Seminario Monte Corbán (afiliado a UPSA). Enfermería.

Secretariado de pastoral de la salud

Rvdo. Sr. D. José María Salazar Corino.

Secretariado de pastoral penitenciaria

Director: Rvdo. P. Lorenzo Aldasoro Albizuribe Osst
penitenciaria@diocesisdesantander.com
Capellán del Centro Penitenciario El Dueso Nacido en Villareal (Álava), el 2 de enero de 1953.
Ordenado el 21 de agosto de 1977.
Estudios: Bachiller en Teología. Licenciatura en Pedagogía por UPSA-Deusto. Cursos de Psicopedagogía en Madrid.

Secretariado de pastoral penitenciaria

Rvdo. P. Lorenzo Aldasoro Albizuribe Osst

Secretariado De Pastoral Para La Discapacidad

Director: Rvdo. Sr. D. Jaime Antonio Gutiérrez Villanueva
discapacidad@diocesisdesantander.com
Nacido en Santander el 12 de febrero de 1974
Ordenado sacerdote el 27 de junio de 1999
Párroco in solidum de Nuestra Señora de los Ángeles y de Santa María Reparadora, de Santander
Estudios: Bachiller en Teología en Seminario Monte Corbán (afiliado a UPSA). Licenciado en Teología. Diplomado en comunicación en Lengua de Signos

Secretariado De Pastoral Para La Discapacidad

Rvdo. Sr. D. Jaime Antonio Gutiérrez Villanueva

Secretariado de semanas sociales

Director: D. Doroteo Sánchez Diego
semanassociales@diocesisdesantander.com

Secretariado de semanas sociales

D. Doroteo Sánchez Diego

Delegación de cáritas diocesana

Directora: Sonsoles López Huete
caritas.cdsantander@caritas.es
Nació en Madrid, el 25 de octubre de 1960
Estudios: Estudios en Trabajo Social Experto universitario en Liderazgo al Servicio de las personas de Cáritas Española.

Delegación de cáritas diocesana

Sonsoles López Huete

Secretariado de pastoral del trabajo

Director: D. Ramón Pacheco García
pastoraldeltrabajo@diocesisdesantander.com

Secretariado de pastoral del trabajo

D. Ramón Pacheco García

Secretariado de manos unidas

Directora: Dª. Blanca Elena Renero Del Val
santander@manosunidas.org

Secretariado de manos unidas

Dª. Blanca Elena Renero Del Val

Secretariado de ecología integral

Director: D. Carlos Díez Diez
ecología@diocesisdesantander.com

Secretariado de ecología integral

D. Carlos Díez Diez

Ilmo Sr. D. Prudencio Cabrero Gómez

Vicaría Judicial

Ilmo Sr. D. Prudencio Cabrero Gómez

Notaria-Actuaria: Dª Ana Belén Díaz-Obregón Sáinz

tes@diocesisdesantander.com
Nació en Santander, el 1 de julio de 1972
Estudios: Licenciatura en Derecho.

Notaria-Actuaria

Dª Ana Belén Díaz-Obregón Sáinz

Administración Diocesana

Administración Diocesana

Ecónomo: D. José María Díaz Y Pérez De La Lastra
economo@diocesisdesantander.com

Ecónomo

D. José María Díaz Y Pérez De La Lastra

Administración Diocesana

Vice-Ecónomo Manuel María Moxó Soto
viceeconomo@diocesisdesantander.com

Vice-Ecónomo

D. Manuel María Moxó Soto

Cancillería Secretaría General

Cancillería Secretaría General

Canciller: Ilmo. Sr. D. Alberto García García
canciller@diocesisdesantander.com
Nació en Santander, el día 15 de noviembre de 1957
Párroco de Santoña.
Ordenado el día 16 de noviembre de 1980
Estudios: Estudios eclesiásticos en Logroño y Santander.

Canciller

Ilmo. Sr. D. Alberto García García

Cancillería Secretaría General

Vice-Canciller: Dª Raquel Campo González
scanciller@diocesisdesantander.com

Vice-Canciller

Dª Raquel Campo González

Consejos

  • Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Arturo Ros Murgadas, Obispo de Santander.
  • Ilmo. Rvdo. Sr. D. Álvaro Asensio Sagastizábal, Vicario General.
  • Ilmo. Rvdo. Sr. D. Ricardo Alvarado del Río, Vicario de Acción Caritativa y Social.
  • Ilmo. Rvdo. Sr. D. Prudencio Cabrero Gómez, Vicario Judicial.
  • Ilmo. Rvdo. Sr. D. Óscar Lavín Aja, Vicario de Evangelización.
  • Ilmo. Rvdo. Sr. D. Jesús Casanueva Vázquez, Vicario para el Clero.
  • Rvdo. P. Víctor Santos Villagrá CM, Delegado Diocesano para la Vida Consagrada.
  • Rvdo. P. José Manuel Méndez Méndez SJ, Presidente de la CONFER.
  • Ilmo. Rvdo. Sr. D. Alberto García García, Canciller-Secretario General.
  • M.I. Rvdo. Sr. D. Juan José Valero Álvarez, Arciprestazgo Santos Mártires.
  • Rvdo. P. Eduardo de Haza Pozanco SSCC, Arciprestazgo Virgen Grande.
  • Rvdo. Sr. D. Álvaro María García Gil-Delgado, Arciprestazgo Bien Aparecida.
  • Rvdo. Sr. D. Antolín García Rozas, Arciprestazgo Ntra. Sra. del Carmen.
  • Rvdo. Sr. D. Baldomero Maza Aja, Arciprestazgo Santa Juliana.
  • Rvdo. Sr. D. Domingo Landeras Landeras, Arciprestazgo San José.
  • Rvdo. Sr. D. Eleuterio Castanedo Torre, Arciprestazgo Sta. María y Miera.
  • Rvdo. Sr. D. Elías Hoyal Hoyal, Arciprestazgo Santa Cruz.
  • Rvdo. Sr. D. José Ramón Lisaso Real, Arciprestazgo Virgen de la Barquera.
  • Rvdo. Sr. D. Juan Luis Cerro Aja, Arciprestazgo Ntra.Sra. de la Asunción.
  • Rvdo. Sr. D. Luis Carlos Fernández Ruiz, Arciprestazgo Ntra. Sra. del Soto y Valvanuz.
  • Rvdo. Sr. D. Manuel Ángel Romero Valero, Arciprestazgo Ntra. Sra. de Montesclaros.
  • Rvdo. Sr. D. Vicente Ruiz de Velasco y Punín, Arciprestazgo Virgen del Mar.
  • Ilmo. Rvdo. Sr. D. Daniel de las Cuevas Lamborena.
  • Rvdo. Sr. D. Romualdo Fernández Martínez.
  • Rvdo. Sr. D. José Manuel Ortiz del Solar.
  • Rvdo. Sr. D. Avelino Seco Muñoz.
  • Rvdo. P. José Salvador Roldán Sanabria OSA.
  • Rvdo. P. Alejandro Salazar Vásquez OCD.
  • Rvdo. Sr. D. Ramón Gómez Ruiz.
  • Rvdo. Sr. D. José María Gutiérrez.
  • Rvdo. Sr. D. Fernando Tabernilla Alonso.
  • Ilmo. Rvdo. Sr. D. Jesús Casanueva Vázquez.
  • Rvdo. Sr. D. Álvaro Asensio Sagastizábal, Vicario General.
  • Rvdo. Sr. D. Ricardo Alvarado del Río, Vicario de Acción Caritativa y Social.
  • Rvdo. Sr. D. Jesús Casanueva Vázquez.
  • Sr. D. Fernando Tabernilla Alonso.
  • Sr. D. Romualdo Fernández Martínez.
  • Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Arturo Ros Murgadas, Obispo de Santander.
  • Ilmo. Rvdo. Sr. D. Álvaro Asensio Sagastizábal, Vicario General.
  • Ilmo. Rvdo. Sr. D. Óscar Lavín Aja, Vicario de Evangelización.
  • Ilmo. Rvdo. Sr. D. Jesús Casanueva Vázquez, Secretario del Consejo Presbiteral.
  • Ilmo. Rvdo. Sr. D. Ricardo Alvarado del Río, Vicario de Acción Caritativa y Social.
  • Rvdo. P. Víctor Santos Villagrá CM, Delegado Diocesano para la Vida Consagrada.
  • Rvdo. P. José Manuel Méndez Méndez SJ, Presidente de la CONFER.
  • Dª. Carmen González Fernández, Delegada de Apostolado Seglar.
  • Por los Arciprestes:

    • Sr. D. Antolín García Rozas
    • Sr. D. Pedro Miguel Rodríguez Ricondo
    • P. Alejandro Salazar Vásquez OCD

    Por los Institutos Religiosos, Sociedades de Vida Apostólica, Orden de las Vírgenes e Institutos Seculares:

    • P. Ferney Correa Flórez OCD,
    • P. Salvador Jiménez Gutiérrez SCHp
    • Sor María Montserrat García Estébanez HC
    • Dª Margarita Hernández Altube
    • Dª Rosa María Arteaga Manjón

    Por el Seminario Mayor:

    • Juan José Conde Muela

    Laicos por Arciprestazgos:

    • Juan Manuel Ortega Ilarza, de Santos Mártires
    • Manuel Ibáñez Pastor, de San José
    • Dª. Amparo Lozano Izquierdo, de Nuestra Señora del Carmen
    • Alfredo González Madrigal, de Virgen del Mar
    • Javier Barquín Velar, de Santa Juliana
    • Eugenio Díaz Sasián, de Virgen Grande
    • Dª. Ana María Gutiérrez Rábago, de Nuestra Señora de Montesclaros
    • Ángel Mantecón Pérez, de Nuestra Señora del Soto y Valvanuz
    • Jesús Blanco Oporto, de Santa María y Miera
    • Dª. María del Carmen Gabiola Calzada, de Nuestra Señora de la Asunción
    • Doroteo Santos Diego, de Bien Aparecida
    • Dª. Ana Isabel Sotres Sánchez, de Santa Cruz
    • Jaime Boville García de Vinuesa, de Virgen de la Barquera

    Por Delegaciones:

    • Dª Marise Otero Pérez, de Catequesis
    • Dª Antonio Nieto Gallego, de Enseñanza
    • Dª. Gloria Martín Díaz, de Pastoral Juvenil, Vocacional y Universitaria
    • Justo Inguanzo Cano, de Familia y Vida
    • Dª Lourdes González Aristigueta, de Liturgia y Espiritualidad
    • D. Jaime Gutiérrez Villanueva, de Pastoral Caritativa y Social
    • Dª. María Fernández-Rosillo Torcida, de Apostolado Seglar
    • José Luis Luengo, Acción Católica.
  • Patricio García Augusto
  • Dª. Sonsoles López Huete
  • Carlos Díez Díez
  • Excmo. y Rvdmo. Arturo Pablo Ros Murgadas, Obispo de Santander.
  • Ilmo. Rvdo. Sr. D. Álvaro Asensio Sagastizábal, Vicario General.
  • D. José María Díaz Pérez de la Lastra, Ecónomo Diocesano.
  • D. Manuel María Moxo Soto, Vice-ecónomo Diocesano.
  • Rvdo. Sr. D. José Manuel Ortíz del Solar, Delegado de Patrimonio Cultural.
  • Rvdo. Sr. D. Juan Carlos Fernández Ruiz.
  • D. Luis Miguel Cano Pasalodos.
  • Dña. Gema Uriarte Mazón.
  • D. Félix Gallego Villa.
  • D. Francisco Javier Asín Zurita, secretario.
  • Ilmo. Rvdo. Sr. D. Álvaro Asensio Sagastizábal, Vicario General.
  • D. José María Díaz Pérez de la Lastra, Ecónomo Diocesano.
  • D. Manuel María Moxo Soto, Vice-ecónomo Diocesano.
  • Rvdo. Sr. D. José Manuel Ortíz del Solar, Delegado de Patrimonio Cultural.
  • D. Luis Miguel Cano Pasalodos.
  • D. Francisco Javier Asín Zurita, secretario.
  • Sr. D. Álvaro Asensio Sagastizábal.
  • Sr. D. Alberto García Garcia.
  • I. Sr. D. José Vicente Pérez Ortiz.
  • I. Sr. D. Juan José Valero Álvarez.
  • Sr. D. Juan Luis Cerro Aja.
  • Sr. D. Pedro Revuelta Abascal.
  • Sr. D. Ángel Antonio Murga Somavilla.
  • P. Victor Santos Vilagrá CM.

Historia de la Diócesis

En 1754 fue creada la diócesis de Santander y a partir de entonces arranca, su historia propiamente tal. Pero es evidente que interesa decir algo, aunque sea sucintamente, de la larga etapa que precedió a este importante hecho histórico. En primer lugar, del comienzo y desarrollo del cristianismo en la región, y después de la administración eclesiástica del territorio y de los trámites que dieron origen ala erección del nuevo Obispado.

 

La antigua Cantabria, cuyos límites si no coinciden plenamente con la demarcación actual de la diócesis santanderina, al menos se le aproximan bastante, fue siempre una región marginal y poco romanizada dentro de la Hispania Romana. (1). Ello no sólo fue debido a su situación geográfica en el confín de la cordillera Cantábrica, naturalmente aislada de las grandes vías de comunicación del país, sino también al carácter independiente de sus gentes, famosas en todo el Imperio por su tenaz resistencia a la dominación romana, hasta el punto de que los cántabros constituyeron el último pueblo sometido, y muy difícilmente por cierto, de toda la Península en tiempos de Augusto (año 19 a. C.). El cántabro «no enseñado a llevar nuestro yugo», según la frase célebre del poeta Horacio, (2) aguardó a la caída del Imperio y entonces, consiguió alzarse de nuevo con su vieja independencia. Fue necesario esperar el empuje conquistador del rey Leovigildo para que la región pudiera ser incorporada a la España Visigoda (año 574 d. C.).

Como el Cristianismo era una religión que se iba propagando especialmente en los medios urbanos, mientras que las viejas religiones se refugiaban en los medios rurales (de ahí el nombre de paganismo), se comprenderá fácilmente que Cantabria no era el país más adecuado para el triunfo de la nueva religión. El retraso de la conversión al cristianismo de todos los pueblos de la costa y cordillera Cantábrica es un hecho que reconocen hoy todos los historiadores que se ocupan del tema (3). Es significativo consignar que el testimonio cristiano más antiguo conservado en lo que hoy es diócesis de Santander, es un vidrio con el anagrama de Cristo (un crismón), hallado en las ruinas de la ciudad romana de Julióbriga, junto a Reinosa y que ha sido datado como de finales del siglo IV o principios del V (4).

Sin embargo, por aquellas mismas fechas, año 399 d. C., un cantabro, llamado Cornelio aún erigía un ara al dios Erudino sobre la cima del Pico Dobra, cerca de Torrelavega (5). Y esto sucedía en un momento en el que no sólo el cristianismo era la religión oficial del Imperio, sino que en virtud del decreto del emperador Teodosio la nueva religión se había convertido de perseguida en perseguidora del paganismo, estando autorizados los cristianos a proceder directamente contra los paganos. El monumento del Pico Dobra no sólo testimonia que aún había paganos en Cantabria, sino que no había cristianos, o si existían, que eran tan escasos que carecían de fuerza para oponerse a los cultos ya proscritos por la autoridad oficial. Esta misma impresión se saca del estudio de las inscripciones funerarias de Cantabria, de las que se conservan más de medio centenar, la mayoría de ellas fechadas a partir del siglo III, todas las cuales, salvo dos o tres, son invariablemente paganas.

Tanto por los restos arqueológicos hallados en algunas cuevas, que les sirvieron de habitaciones, como por ciertas referencias literarias, sabemos que en la época visigoda, especialmente a partir de la conquista de Leovigildo, se inició una intensa evangelización a cargo de monjes procedentes del valle del Ebro y de la Tierra de Campos. Entre los primeros hay que citar a San Millán de la Cogolla, y entre los segundos a Santo Toribio de Palencia «que destruyó el culto de los ídolos» (6) y debió fundar el monasterio de San Martín, en Liébana, más tarde llamado de Santo Toribio.

Pero la verdadera conversión de Cantabria no debió realizarse en su integridad hasta los comienzos del siglo VIII, con motivo de haberse refugiado en estas montañas las gentes huidas de distintas ciudades españolas y concretamente de Toledo, con motivo de la invasión árabe. Es entonces cuando el Ducado de Cantabria, poco después integrado en el Reino de Asturias, se convierte nuevamente en el foco de insurrección y cuna de la Reconquista. Con la huida a los montes debieron llegar a la futura diócesis las reliquias más insignes que hoy en día se conservan, tales como el Lignum Crucis, de Liébana: el cuerpo de Santa Juliana, en Santillana, y las reliquias de los Santos Emeterio y Celedonio de la actual catedral de Santander, procedentes de Calahorra (7).

Surgen por todas partes multitud de monasterios, entre los que se citan algunos ya en el siglo IX, como San Martín de Liébana, Santa María del Puerto, Santillana, Santa María del Yermo, San Pedro de Cervatos, San Andrés de Aja; y otros en el siglo X, como Santa María de Lebeña, Santa María la Real de Piasca, San Fructuoso de la Miña, Santa María de Villacantid, San Fructuoso de Miengo, San Emeterio de Santander, San Román de Moroso, San Martín de Elines, etc. (8).

 

La historia de la futura diócesis santanderina no puede menos de hacer referencia expresa a la persona y obra de San Beato de Liébana, que en pleno siglo VIII se constituyó en lumbrera de la nueva cristiandad de los reinos independientes del Norte. San Beato mantuvo una célebre polémica teológica, en torno, a las cuestiones del Adopcionismo, con el famoso Elipando, que por entonces regía la sede de Toledo. El santo lebaniego es el creador del ideal de Santiago como patrono de la España que lucha en defensa de su fe (9).

De los primeros tiempos de la Reconquista apenas se conservan monumentos, pero es preciso señalar aquí las famosas iglesias rupestres de Valderredible: Arroyuelos, Las Presillas, Cadalso, Campo de Ebro y Santa María de Valverde (10) y la bella iglesia mozárabe de Santa María de Lebeña, sin contar otras de menor importancia, pero del mismo estilo en Helguera, San Román de Moroso y San Juan de Socueva (11).

Ya avanzada la Reconquista -en el siglo XII- surgió una fiebre constructora de iglesias y monasterios en estilo románico, de los cuales se han conservado un crecido número de ejemplares, entre los que destacan por su importancia las colegiatas de Santillana, Castañeda, Cervatos y las iglesias de Santa María de Piasca, de Bareyo, etc. (12). Del gótico hay ejemplares dignos, construidos sobre todo en las villas de la costa que florecieron por su comercio marítimo a partir del siglo XIII (13). Estas son las iglesias de Castro Urdiales, Laredo, Santoña, Santander y San Vicente de la Barquera. Un nuevo impulso constructor de iglesias se registra en el siglo XVII, cuando la futura diócesis santanderina se distingue por el número y calidad de sus maestros canteros, imagineros, tallistas, doradores y campaneros, que no sólo se contentan con poblar su país de espléndidas iglesias, sino que aceptan contratos de trabajo en toda España y destacan por el valor extraordinario de sus obras (14).

La construcción administrativa de la Iglesia en Cantabria

Digamos ahora algo sobre la situación administrativa eclesiástica de Santander hasta la erección del Obispado. En el siglo VIII se crea la diócesis de Amaya, ciudad cántabra bastión fronterizo por el sur, situado cerca de Alar del Rey, que debió ser una especie de capital del país, desde que Julióbriga fue incendiada a principios del siglo V. Posiblemente la ciudad, materialmente, se hallaba entonces destruida a causa de su crítica situación geográfica en la lucha contra el Emirato de Córdoba, pero, ello no era obstáculo, ni en ésta ni en otras ocasiones, para que aun así las ciudades figuraran nominalmente como capitales o sedes episcopales (15).

A principios del siglo IX había ya desaparecido la diócesis cántabra de Amaya, que teóricamente abarcaría todo el territorio de la vieja Cantabria, aunque en la práctica el número de obispos de otras sedes españolas «in partibus infidelium» refugiados aquí, debía crear un complicado problema jurídico, cuyos términos precisos no se nos alcanzan.

Por entonces la diócesis de Santander se hallaba repartida entre las sedes siguientes: Oviedo, fundada en el 802, que abarcaba también las Asturias de Santillana, es decir, la zona occidental de la actual provincia hasta la ciudad de Santander; Valpuesta, en el partido de Villarcayo, fundada en el 804, que comprendía la parte oriental de la provincia, así como Campoo y Valderredible (16); la región de Liébana y Polaciones debió pertenecer temporal e indistintamente a las viejas diócesis de Osma y Palencia ya la de León, fundada en el 792. En el siglo XI, a la muerte de Fernando I, la futura diócesis santanderina se hallaba dividida entre Oviedo, que mantenía sus mismas posiciones territoriales; la diócesis de Nájera, que había sustituido ala de Valpuesta en las suyas, al pasar a depender aquellos territorios del reino de Navarra (17); la diócesis de León, que retenía firmemente Liébana, y de nuevo Palencia, restaurada en 1035, que absorbía la zona de Polaciones y algunas iglesias de Liébana. El rey de Castilla Sancho II pretendió unificar estos territorios desde el punto de vista eclesiástico, adjudicándolos ala de nuevo restaurada sede de Oca. Por esto surgió un largo pleito entre los Obispos de Oviedo y Burgos, Obispado este último que a partir de 1075 absorbe y sustituye a Oca (18). León y Palencia quedaron en tranquila posesión de sus dominios cántabros hasta el siglo XX.

El pleito por Santander entre Oviedo y Burgos duró más de un siglo y se vio enconado por el hecho de pertenecer ambas sedes a dos reinos distintos: León y Castilla (19). Por fin, en 1184, reunidos en Burgos ambos reyes, Oviedo cedió a Burgos sus derechos, mediante una importante compensación de carácter económico.

De nuevo surgirá un largo pleito por cuestiones territoriales eclesiásticas, pero esta vez será entre la ciudad de Santander y el Arzobispado de Burgos, por pretender aquélla erigirse en diócesis independiente. La cuestión se inicia en el siglo XVI, durante el reinado de Felipe II y no se concluye hasta el siglo XVIII, siendo rey Fernando VI (20). Felipe 11, Felipe III y Felipe IV presentan instancias a Roma solicitando la desmembración de los territorios llamados las Montañas Bajas y la creación de una nueva sede en la villa de Santander. Por entonces, los arzobispos burgaleses apoyaban la iniciativa, no así el Cabildo Catedralicio; pero a partir del reinado de Carlos II, tanto los prelados como todos los estamentos burgaleses se opondrán insistentemente a la división. La historia de visitadores, informantes, sopesamiento de las razones, es muy larga y no culminará hasta que un montañés famoso, el jesuita P. Rábago llegue a ocupar el puesto de confesor de Su Majestad. A sus instancias Fernando VI urgió de nuevo la cuestión a Roma a través de su embajador Puertocarrero. Por fin, el 12 de diciembre de 1754, Benedicto XIV publicaba la bula «Romanus Pontifex» por la que Santander se constituía en cabeza de Obispado. Este abarcaba la costa y la cordillera desde el Deva al Nervión, comprendiendo algunos valles que mucho después pasaron a Oviedo en lo eclesiástico y en lo civil, como Peñamellera, Rivadedeva, y, por supuesto, las Encartaciones de Vizcaya hasta la ría de Bilbao, que permanecerían como santanderinas hasta la creación de la diócesis de Vitoria en 1851. Por el interior, los límites con Burgos se fijaban en la divisoria de aguas de la cordillera, con lo que Reinosa y SU zona quedarían aún retenidas por Burgos hasta 1956. Lo mismo habría de suceder con los enclaves de León y Palencia, dándose el caso paradójico de que el pueblo natal del Padre Rábago, Tresabuela de Polaciones, quedaría fuera de los límites de la nueva diócesis santanderina, cuya creación a él se debía.

La villa de Santander, a pesar de la «densidad de población, el incremento del comercio y de otras cualidades que le completan» -como diría el Papa- no era en realidad por entonces más que un villorio de apenas 2.300 habitantes, aunque en el siglo XV su población, había sobrepasado los 10.000.

La vieja «abadía de los Cuerpos Santos» se convirtió en la nueva catedral y la «noble y leal» villa dejaba oficialmente de serlo por obra y gracia del P. Rábago y decreto del rey, con fecha 9 de enero de 1755, para convertirse en ciudad: «En consecuencia de esta mi Real Resolución mando a todos ya cada uno de Vos los sobredichos que la hayáis y tengáis por tal y la llaméis ciudad, así por escrito como de palabra». Todo lo demás vendría como consecuencia: la apertura del comercio libre con América en 1778, la creación del Real Consulado de Santander en 1785 y finalmente, la erección en capital de provincia, con lo que la posterior grandeza de esta ciudad asienta sus raíces en la fundación de su Obispado (21).

(1) GONZALEZ ECHEGARAY, J. Los Cántabros, Edic. Guadarrama, Madrid 1966.

(2) Carm. II, 6, 2.

(3) BARBERO, A. y M. VIGIL, Sobre los orígenes sociales de la Reconquista, Ariel, Barcelona 1974.

(4) GARCIA Y BELLIDO, A.; FERNANDEZ DE AVILES, A.; MONTEAGUDO, L. y P. VIGIL, Excavaciones en Julióbriga y exploraciones en Cantabria (Campanas 1953-1956). Archivo Español de Arqueología 93-94 (1956): 131-199.

(5) GARCIA Y BELLIDO, A. GONZALEZ ECHEGARAY, J., Tres piezas del Museo Arqueológico Provincial de Santander, Archivo Español de Arqueología 76 (1949): 241-247.

(6) De Viris llIustribus, III.

(7) GONZALEZ ECHEGARAY, J. Orígenes del Cristianismo en Cantabria, Institución Cultural de Cantabria, Santander 1969.

(8) ESCAGEDO SALMON, M. Crónica de la Provincia de Santander, Tomo I, Santander 1919. Instituto Enrique Flórez, Diccionario de Historia Eclesiástica de España, Vol. III. Madrid 1973. Cfr. Monasterios.

(9) SANCHEZ ALBORNOZ, D., España un enigma histórico, 2ª Edic. Sudamericana, Tomo I. Buenos Aires 1962.

(10) GONZALEZ ECHEGARAY, J.; CARRION IRUN, M., y PEREZ DE REGULES, A, Las iglesias rupestres de Arroyuelos y Las Presillas, Altamira (1961); MADARIAGA DE LA CAMPA, B., Notas acerca del origen de las iglesias rupestres. Altamira (1968-1971): 153 y 55.; CARRION IRUN, M. y GARCIA GUINEA, M. A., Las iglesias rupestres en la época de repoblación en la región cantábrica, Congreso Luso-Espanhol des Estudos Medievais, Cámara -Municipal de Porto, 1968.

(11) CARRION IRUN, M., El Pre-románico en Santander, en «La Edad Media en Cantabria». Institución Cultural de Cantabria, Santander 1973, pp. 37-57.

(12) ORTIZ DE LA TORRE, E., Arquitectura religiosa, Madrid 1926; GARCIA GUINEA, M. A., Un esquema del arte románico en Santander, en «La Edad Media en Cantabria», Institución Cultural de Cantabria, Santander 1973, pp. 73-108.

(13) ALAVA AGUIRRE, J. M., El gótico en la Montaña, en «La Edad Media en Cantabria», Institución Cultural de Cantabria, Santander 1973, pp. 149-185.

(14) SOJO Y LOMBA, F., Los maestros canteros de Trasmiera, Madrid 1935; GONZALEZ ECHEGARAY, Mª del Carmen, Documentos para la Historia del Arte en Cantabria, Institución Cultural de Cantabria, 2 tomos, Santander 1970 y 1972; PEREDA DE LA REGUERA, M., Alejandro Gargallo, Biblioteca de Autores Montañeses, Santander 1951 ; Rodrigo Gil de Hontañón, B. A. M., Santander 1954.

(15) GARCIA VILLADA, Z., Historia Eclesiástica de España, Madrid 1929-1936, Tomo II, 1ª parte.

(16) SERRANO, El Obispado de Burgos y Castilla Primitiva desde el siglo Val VIII, Madrid 1935.

(17) PEREZ DE URBEL, J., Historia del Condado de Castilla, 2ª Edic., Madrid.

(18) GONZALEZ ECHEGARAY, J., Orígenes del Cristianismo, citada.

(19) ESCAGEDO SALMON, M., Vida monástica en la provincia de Santander, Tomo 1, Liébana y Santillana, Torrelavega 1918.

(20) LODOS, F., Los orígenes de la diócesis de Santander, Miscelánea Comillas 1 (1942): 395-439; MANSILLA D., El Obispado de Santander, Hispania sacra 4 (1951): 81-130; DE LA HOZ TEJA, J., Laboriosas gestiones para la erección del Obispado de Santander , Altamira (1954): 90-105; LODOS, F., La creación del Obispado de Santander, Altamira (1955): 109-242.

(21) Sobre la historia de Santander en aquella época pueden ver: MAZA SOLANO, T., Cuando Santander era una villa, Altamira (1955): 36-82; SIMON CABARGA, J., Perfil histórico- anecdótico de la ciudad, Altamira (1955): 83-108; BARREDA, F., El engrandecimiento de la ciudad y el Real Consulado Santanderino, Altamira (1955): 243-287.

Patrona y Patronos

Nuestra Señora Virgen Bien Aparecida, Reina y Madre de la Montaña

Ubicación

A 5 Kms. de Ampuero y a 12 de la carretera de Irún a Santander se levanta sobre una colina el Santuario de la Patrona de la región de Santander, la Virgen Bien Aparecida.

En 1605 unos niños pastores encontraron de modo prodigioso, en una ventana de la ermita de San Marcos allí situada, una imagen muy pequeña de la Virgen María. El hecho singular tiene gran repercusión en toda la región y pronto se inició una afluencia de romeros a la montaña de Somahoz, naciendo así este importante Santuario Mariano.
La Imagen, de 21 centímetros de altura, es de madera policromada y su origen puede datar del siglo XV, siendo encuadrada por los especialistas en el estilo hispano-flamenco.
A principios del siglo XVIII se construye el actual templo, en el que cabe destacar sus cinco retablos del estilo barroco-churrigueresco, verdadera filigrana de labrado, con sus tallas policromadas de tamaño natural, llenas de expresión y belleza. Son obra de la escuela de artistas trasmeranos, famosa en el s. XVIII. De ellos se conservan en la actualidad tres, habiendo sido trasladado uno de los restantes a la catedral de Santander en 1955; el otro desapareció a primeros de siglo, a consecuencia de las termitas.
La advocación de la Bien Aparecida se desarrolla por aquellos años íntimamente ligada a los montañeses nativos y de una forma especial a todos aquellos que emigran hacia otras tierras. Entre éstos sobresalen los emigrantes a América y los residentes en Madrid. Estos últimos determinan en 1752 fundar en Madrid la Congregación de Nacionales de la Montaña, bajo el patronazgo de la Bien Aparecida, imagen que veneraban en la iglesia de San Felipe el Real.

Pero oficialmente, este patronazgo de la Bien Aparecida sobre la diócesis y región de Santander no quedó constituido hasta el año 1905: San Pío X, a los tres siglos de la aparición, y siendo obispo de Santander Vicente Santiago Sánchez de Castro declaró Patrona a Santa María bajo la advocación de Bien Aparecida. Fue consecuencia de la petición formulada por el Ayuntamiento de Ampuero, párroco de Marrón, Diputación Provincial y los siguientes Arciprestazgos: Ampuero, Camargo, Carriedo, Cesto y Voto, Castro Urdliales, Cinco Villas de Pesquera, Comillas, Cudeyo, Escalante, Laredo, Muslera, Ontaneda, Piélagos, Ruesga, Ribamontán, Santoña, Santillana, Torrelavega, Valle de Mena y Vega de Pas.
Desde el año del Patronazgo se hacen cargo del Santuario los Padres Trinitarios, habiendo sido el convento, a través de los años, noviciado de la Orden, hospital de sangre en la guerra, sanatorio antituberculoso, y seminario desde 1952 hasta 1975.

En 1955 tuvo lugar la Coronación Canónica de la Imagen, en solemnísima ceremonia celebrada en la plaza de las estaciones, estando presentes todas las advocaciones marianas de la Diócesis. La coronó Mons. José Eguino y Trecu. verdadero impulsor de la devoción bienaparicionista.

El Santuario es visitado durante todo el año y tiene una vida muy intensa en determinados períodos del mismo. En la fiesta patronal del 15 de septiembre. la colina de Somahoz se convierte en un verdadero centro del sentir religioso popular regional, siendo ininterrumpido el desfile de peregrinos y romeros.

Santos Emeterio y Celedonio, patronos de la Diócesis

Emeterio y Celedonio eran oriundos de Calahorra (La Rioja) y sufrieron en esa ciudad el martirio durante la persecución de Diocleciano, en torno al año 298. Emeterio y Celedonio militaron en las legiones romanas, pero las abandonaron profesando públicamente la milicia de Cristo.

Llevados ante un tribunal, confesaron su fe y fueron atormentados en la cárcel por algún tiempo. En las afueras de la ciudad, junto al San Celedoniorío Cidacos, afluente del Ebro, sufrieron el martirio y fueron decapitados un 3 de marzo. Allí quedaron sepultados sus restos.

Las reliquias de los Santos Mártires fueron traídas a Cantabria, como otras tantas, en la Alta Edad Media por razones de seguridad, defendiéndolas de las incursiones árabes y estuvieron ocultas bajo la actual Iglesia de El Cristo. En unas excavaciones realizadas en 1531 se hallaron y se encerraron en los actuales relicarios y se expusieron al culto en el templo donde ahora reposan.

La devoción a los Santos Mártires no solo afecta a la ciudad de Santander, que probablemente toma su nombre de San Emeterio, sino también a la región. El Papa Pío VI, a petición del entonces obispo de Santander, Menéndez de Luarca, en Breve del 30 de septiembre de 1791 los declaró Patronos de la Diócesis.
La festividad de los Santos Emeterio y Celedonio se celebra el día 30 de Agosto.

San Celedonio patrono de la Diócesis de Santander
San Celedonio
San Emeterio patrono de la Diócesis de Santander
San Emeterio