El Seminario de Monte Corbán acogió el sábado 29 de Noviembre un encuentro de los diversos movimientos y asociaciones que conforman la Delegación de Apostolado Seglar. También nos acompañó el Vicario de Evangelización, D. Óscar Lavín y representantes de la Delegación de Familia. Esta reunión, que contó con una amplia representación de las distintas realidades laicales de la Diócesis, tuvo como objetivo principal compartir y poner en común los programas, proyectos y actividades diseñadas para el curso 2025/2026. Esta puesta en común no solo busca optimizar los esfuerzos, sino también fortalecer los lazos de sinodalidad, promoviendo una participación mutua que permita a todos «hacer Iglesia» y caminar unidos. La rica y activa presencia de laicos organizados en estos movimientos subraya su compromiso esencial con la vida pastoral de la Diócesis.
El encuentro fue un espacio clave para profundizar en el Plan Pastoral Diocesano y la visión de la presencia en la vida pública. D. Óscar Lavín expuso detalladamente el trabajo sinodal en curso, enfocado en reavivar o crear nuevos Consejos Arciprestales. Esta estructura, con sus coordinadores, moderadores y secretarios, culminará en la formación de un Consejo Sinodal, que aplicará la metodología de la escucha en el Espíritu para impulsar la vida pastoral, discernir fortalezas y debilidades, y actuar como un efectivo sistema de comunicación entre los distintos territorios diocesanos. Complementando esta perspectiva, la delegada presentó el trabajo propuesto por la CEE, «Pueblo de Dios que sale al encuentro», un itinerario formativo sobre la Presencia en la Vida Pública que se invitó a estudiar y asumir como propio en cada una de las asociaciones presentes.

Tras las exposiciones y un enriquecedor debate, los asistentes dedicaron un espacio a compartir las futuras iniciativas de sus respectivos movimientos y asociaciones para el curso. Cada realidad laical tiene programados diversos momentos de formación, espiritualidad y servicio a lo largo del año. Estas actividades incluyen desde jornadas y retiros en tiempos litúrgicos clave, hasta encuentros formativos y culturales con temáticas de relevancia social y eclesial, así como el desarrollo de servicios concretos de caridad y misión. De forma abstracta, se vislumbra un curso lleno de propuestas de encuentro y crecimiento, destinadas a profundizar la fe de sus miembros, difundir el mensaje del Evangelio y ejercer un influjo cristiano en la sociedad, asegurando una presencia activa en los distintos ámbitos de la vida diocesana.